12/12/2022 - Política y Sociedad

Ahora nos volvimos a ilusionar: Contra Croacia, por un lugar en la final

Por Francisco José Mantel

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Tan cerca y a la vez tan lejos. Dos partidos separan a la Argentina de la gloria eterna. De ganar un Mundial. De cumplir el sueño, de tocar el cielo con las manos. Argentina jugará otra vez una semifinal del mundo. La quinta en su historia. Ganó todas: 6-1 a Estados Unidos en 1930, 2-0 a Bélgica en 1986, 4-3 por penales – tras empatar 1-1- a Italia en 1990 y 4-2 –también por penales tras empatar 0-0- a Holanda en 2014. El martes 13, a las 16 hs y contra Croacia, se buscará llegar a otra Final del Mundo.

Y Argentina va… Dejó en el camino a Australia, venciéndola categóricamente desde el juego, pero no desde el resultado: 2-1 poco exhibicionista para los resultadistas, pero muy atractivo e interesante para quienes valoramos la creación de juego, la búsqueda. Un Messi veinteañero e iluminado. Una araña que pica y picó. Y San “Dibu”, apareciendo cuando más lo necesitábamos.

Holanda. Digna de un párrafo aparte. Y es que fue, posiblemente, el partido más apasionante de la Selección que se ha visto desde aquel Brasil-Argentina en Italia 90. Hay partidos que traspasan los 90 o 120 minutos y esos son aquellos que comienzan a jugarse antes de que empiece. “No juega mucho con el rival cuando tiene la posesión del balón”, “Si tenemos que llegar a los penales, ahora estamos en ventaja”, fueron algunas de las frases del técnico neerlandés que calentaron la previa.

Leña al fuego para nuestro capitán Messi y música para los oídos de “Dibu” Martínez. Argentina optó por el camino del silencio y poner en palabras su fútbol, durante el partido. Un acto de disciplina poco reconocido por la jerga futbolera, que decide quedarse con una foto. El equipo de Scaloni mereció ganar en los 90 minutos, pero no tuvo esa fortuna. Un arbitraje polémico, diecisiete amarillas y un alargue para el infarto hicieron que los penales sean aún más vibrantes que aquellos de 2014, que también supimos ganar. Nuestro arquero, otra vez, se convirtió en héroe. El “Dibu” atajo dos penales de cuatro posibles y le cedió la llave a Lautaro Martínez, que se vistió de Maxi Rodríguez, y le puso fin a los Países Bajos. Pintura sobre lienzo es la foto del “Toro”, de rodillas y emocionado, festejando la victoria y el pase a semifinales. Un desahogo total. Un equipo detrás que corre a abrazarlo. Un país que llora emocionado, porque vuelve a creer, porque vuelva a ilusionarse. Porque quiere ganar la tercera y ser campeón mundial.

Del otro lado estará Croacia, que viene de eliminar ni más ni menos que a la Brasil de Tité, favorita en los papeles con un plantel plagado de estrellas. Finalista del último Mundial, el equipo de Dalić sigue haciendo historia. Con grandes figuras como Modrić, Kovačić, Perišić y Brozović, entre otros, los croatas buscarán la hazaña. Nosotros trataremos de impedirla. El martes será la revancha de aquel trágico 3-0 en Rusia, por la segunda fecha del Grupo D, que nos condenó al milagro de Nigeria en un Mundial para el olvido.

Esta Copa del Mundo no conoce de favoritos ni de candidatos. En la otra llave Marruecos venció a Portugal y espera por Francia. Un equipo africano peleará por estar en la final de un mundial por primera vez en la historia. Fantástico para quienes amamos la sorpresa y odiamos la lógica. El 18 será la final.

Tan cerca y a la vez tan lejos. Otra semifinal. Otro partido que quedará en la historia de la Selección y la historia de los Mundiales. En tu historia, en la nuestra. Soy de los que creen que hay un destino, que hay un por qué. Que por algo fuimos a los penales contra Países Bajos, y no lo ganamos cómodos en los 90. Que “Dibu” necesitaba el envión de los 12 pasos. Que Lautaro tenía que convertir ese gol y depositarnos otra vez entre los cuatro mejores. Y que Messi necesitaba seguir dando la talla para continuar siendo el mejor jugador de este Mundial, para la alegría de muchos y el disgusto de otros pocos.

Argentina contra todos. Porque si los demás hablan antes de tiempo son reflexivos, pero si nosotros respondemos somos agrandados y sobradores. Porque si ellos apuran e intimidan a nuestros jugadores antes de un penal es “parte del fútbol”, pero si nosotros le devolvemos con la misma moneda le faltamos el respeto al deporte.

40 millones de argentinos, 40 mil en Qatar y 11 en la cancha. Todos juntos. El Martes 13 a las 16 hs, para conseguir otra vez el pase a la Final. ¡VAMOS ARGENTINA!

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fran mantel

Francisco José Mantel

Hola, mi nombre es Francisco Mantel, tengo 24 años y soy Licenciado en Ciencias de la Comunicación. Actualmente trabajo en el Club Atlético River Plate como creador de contenidos, dentro del equipo de Comunicación y Marca. Me gusta mucho la Radio y las entrevistas. Deportista. Futbolero.
"Al final hay recompensa".

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