10/8/2022 - Política y Sociedad

Asumió Massa, ¿y ahora qué?

Por Augusto Macias

Asumió Massa, ¿y ahora qué?

Sergio Massa asumió el miércoles pasado como Ministro de Economía con facultades ampliadas, a comparación con sus predecesores durante esta gestión. Ahora él tiene las riendas de Producción y de Agricultura, Ganadería y Pesca. Además, su esfera de influencia se amplía a otros ámbitos, donde logró colocar a funcionarios que le responden, como a Matías Tombolini en la Secretaría de Comercio Interior y a Silvia Royón en Energía.

La principal pregunta ante esta situación, es si el -nuevo- relanzamiento del Frente de Todos es suficiente para frenar la crisis económica y torcer el rumbo, lo cual implicaría controlar el aumento de la inflación e impulsar un sendero de recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores, cuyos salarios parecen estar siendo vapuleados hace años por un arma automática de gran calibre. En segundo lugar, cabe reflexionar sobre el rol del presidente a partir de ahora. Finalmente, y aunque en Argentina un año equivalgan a cuarenta en otros lugares del mundo, cabe la pregunta por las elecciones de 2023: si Massa tiene una gestión “exitosa”, ¿tiene chances de sorprender a una oposición que ya está eligiendo una nueva decoración para Olivos?

Para Lucas Klobovs, analista político en Poliarquía, “la llegada de Massa implica que el Frente de Todos decidió validar medidas ortodoxas o pragmáticas para encausar la situación. El Kirchnerismo está haciendo un apoyo implícito, sin dar grandes declaraciones, pero con pequeños gestos, como la foto de Cristina Kirchner con Massa. Si le llega a ir mal, ellos van a negar el apoyo”.

En su primera semana, el flamante ministro anunció los lineamientos de su programa económico, más bien ortodoxo, que incluye cuatro ejes: orden fiscal, superávit comercial, fortalecimiento de reservas y desarrollo con inclusión. En este sentido, sostuvo que se cumplirá la meta del 2,5 de déficit fiscal establecida por el presupuesto, se continuará con el recorte de subsidios energéticos, se tomará deuda en dólares con la CAF y se “reordenarán” los planes sociales.

Para el economista Federico Furiase, el desafío a corto plazo es “generar incentivos a una liquidación sostenida de la cosecha que permita acumular reservas. Para eso, debe atender el frente cambiario: tarde o temprano va a haber que mejorar el tipo de cambio real". Mientras tanto, en la primera semana, logró que los dólares financieros y el libre bajaran, mientras que los bonos de la deuda pública se revaluaran.

Paralelamente, el gobierno no puede descuidar las necesidades de las crecientes clases bajas y de las medias. Porque, hasta ahora, los lineamientos apuntan al “mercado” y no responden a sus inquietudes cotidianas, lo cual es delicado en un país donde los esfuerzos son cada vez menos recompensados. En este campo, está en juego su relación con los sectores populares, a quienes dicen representar, y también con parte de la coalición.

Juan Grabois amenazó romper con bloque del Frente de Todos en Diputados si Massa no impulsa el salario básico universal. Eso provocaría que se pierdan tres legisladores y Juntos por el Cambio pase a ser la primera minoría.  “Si perdemos el sentido de la militancia, perdemos el alma de lo que hacemos”, afirmó en Radio Con Vos.

Y su decepción es entendible. ¿Para qué desgastó el kirchnerismo tanto al presidente y su gabinete si finalmente terminó convalidando lo que criticaba, al avalar un sendero económico similar al de Martín Guzmán y Silvina Batakis? Da para pensar que lo más irritante para la vicepresidenta no era el "sendero", sino la languidez del presidente para liderar y accionar políticamente: las contradicciones permanentes, la falta de sorpresa y la insípida comunicación gubernamental, que mareó a los propios y envalentonó a los sectores de poder.

En ese sentido, un posible arreglo entre los tres ejes del oficialismo para destrabar el empantanamiento político, puede haber sido que el expresidente de la Cámara de Diputados sea ahora quien tome las decisiones importantes y Alberto Fernandez esté fácticamente subordinado a él. El errático ritmo de toma de decisiones del presidente agravó los problemas económicos y, quizás, la llegada de Batakis haya sido su última gran jugada. “Hubo un error de estrategia cuando renunció Guzmán. Ahí, Alberto tuvo la chance nombrar a Massa para no mostrarse en extrema debilidad. Se iba un ministro y venía otro. Pero eligió a Batakis, el mercado le dio la espalda y ahí salió a buscar un salvador”, explicó Klobovs.

El nuevo Ministro de Economía, de manifiestas ambiciones presidenciales, debe superar varios obstáculos de cara al 2023, que implican contentar a propios y ajenos, para mantener estable una coyuntura al rojo vivo. Resta por verse su capacidad de negociación y pragmatismo en un mundo incierto. Aunque, según su nueva suegra, Moria Casán, de cintura política, él tiene un hula-hula.

“Massa viene con una imagen bastante deteriorada desde hace varios años. Un crecimiento de su imagen depende de que tenga pequeños logros en materia económica, como que la inflación baje un poco y que el dólar no aumente. Si más o menos logra tranquilizar la economía en algunos parámetros básicos, se posiciona como un candidato competitivo”, acotó Klobovs.

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augusto macias

Augusto Macias

Hola, soy Augusto Macias, estudiante de Ciencias de la Comunicación Social en UBA. Trabajo como productor periodístico en diferentes radios y esporádicamente como notero. Me intereso por la política tanto local como internacional. Además me gusta viajar para descubrir nuevos paisajes y conocer cómo vive la gente en distintas partes del mundo. De hecho, lo hice por un año y medio, antes de regresar a Argentina para continuar con mis estudios.

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