31/5/2023 - Política y Sociedad

La ayuda humanitaria en la política exterior argentina: El caso de Cascos Blancos

Por Juan Gentiletti

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Cascos Blancos: La herramienta de ayuda humanitaria de Argentina en su estrategia de política exterior e inserción internacional

La ayuda humanitaria constituye una interesante herramienta que Argentina dispone para elaborar su estrategia de política exterior e inserción internacional. Hacia muchas regiones como el África Subsahariana, Medio Oriente, o el Caribe angloparlante, constituye uno de los elementos claves a la hora de proyectar un vínculo de cooperación sur-sur o triangular, conjuntamente con las misiones para el mantenimiento de la paz, entre otras. Para muchos países de estas regiones, con los cuales Argentina no tiene un historial de relaciones densas e intensas, Cascos Blancos ha sido el gran primer acercamiento para construir una agenda positiva.

Argentina basa su ayuda humanitaria en los principios de imparcialidad, neutralidad, independencia y humanitarismo, y gran parte de esta tradición que Argentina ostenta se debe a los Cascos Blancos ya que ha sido el organismo nacional del diseño e implementación de la asistencia humanitaria por excelencia (Virasoro, 2022). En este sentido, Cascos Blancos no hace distinción a la hora de prestar ayuda. La asistencia humanitaria se activa a petición de un Estado que se ve afectado. Los equipos de asistencia se conforman de manera ad hoc, y el criterio se establece conciliando las necesidades a cubrir en terreno y las partidas presupuestarias.

El cuerpo de Cascos Blancos fue creado en 1994 como un instrumento para combatir el hambre y la pobreza en el ámbito de una comisión de la Presidencia de la Nación. Tradicionalmente la ayuda humanitaria se enmarca en un modelo de cooperación norte-sur, donde un país desarrollado ayuda a otros países en vías de desarrollo. En ese contexto, el gobierno de Carlos Menem (1989-1999) buscaba poner a Argentina a la par de un grupo de países desarrollados que contaban con organismos especializados de asistencia humanitaria.

Un hito en la ayuda humanitaria y la construcción de un multilateralismo solidario

Los Cascos Blancos marcaron un importante hito en la ayuda humanitaria. Con su creación, se inició la participación de los países en desarrollo en este tipo de tareas. Hoy Argentina tiene una voz válida, una marca, en términos de agenda humanitaria internacional y en los esfuerzos por construir un multilateralismo solidario que puede permitir sacar provecho en la cooperación sur-sur por fuera de los grandes lineamientos que los países desarrollados digitan a la hora de gestionar y orientar la ayuda humanitaria. En este sentido, Argentina posee capacidad propia (dada por la voluntad política, la labor del Ministerio de Relaciones Exteriores y el capital humano de los voluntarios) que otros países de renta media no la tienen.

Con el paso del tiempo y producto del trabajo junto con la organización de Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos (OEA) y sus renovados co-patrocinios, el tipo de misiones de asistencia fue complejizándose y los Cascos Blancos fueron adquiriendo cada vez mayor prestigio y reconocimiento internacional. De misiones de asistencia en desastres naturales, se pasó a escenarios más complejos de descomposición social y política. En sintonía con estos cambios, la institución fue perfeccionada con un creciente proceso de profesionalización. La absorción de Cascos Blancos a la estructura del Ministerio de Relaciones Exteriores y el involucramiento de sus cuadros técnicos (diplomáticos de carrera) retroalimentó el prestigio y el reconocimiento antes mencionados.

Un hito en la ayuda humanitaria bajo el enfoque de cooperación sur-sur

Recapitulando, Cascos Blancos representa todo un hito en la ayuda humanitaria si se observa desde el enfoque de cooperación sur-sur (contrario al norte-sur). Implica una manera diferente de entender la simple respuesta a los desastres, para pasar a actuar bajo el paradigma de “gestión del riesgo de desastres". Se trata de un enfoque integral que contiene la mitigación y prevención de las vulnerabilidades, el brazo más operativo de respuestas, y la recuperación en sociedades desigualitarias donde las amenazas son de variadas naturalezas (Cancillería Argentina, 2021). A modo de ilustración, el paso de un terremoto en una zona densamente poblada, con crisis habitacional, altos niveles de pobreza y carente de recursos y cadenas logísticas esenciales, no solo genera más daño sino que también dificulta la recuperación.

Al año 2021, Cascos Blancos desde su creación ya llevaba desplegadas más de setecientas misiones en setenta y tres países, de cinco continentes (Cancillería Argentina, 2021). Las misiones se computan aparte del envío de insumos. Dentro de este primer gran universo, podemos mencionar la misión en Estados Unidos tras el paso del huracán Katrina (2005), y las misiones en Haití (2010 y 2012), como ejemplos de misiones para la gestión de desastres naturales. Entre otras misiones de otro tipo se encuentran la misión en Túnez a raíz del colapso libio y la emergencia fronteriza (2011), la misión en Irak a causa del conflicto en Siria (2014), la misión en Sudán del Sur para asistir en campamentos de refugiados, la misión en El Líbano en el marco de la crisis de refugiados sirios (2016) y las misiones en Mozambique (2015 y 2017) para asistir a la población tras fuertes inundaciones y para fortalecer las técnicas de producción de alimentos.

Equipo de rescate de Cascos Blancos en Turquía (2023)

Ayuda humanitaria en escenarios de crisis

Recientemente, en estos últimos dos años, Cascos Blancos ha actuado en dos escenarios de importancia. Por un lado, en el año 2022, Cascos Blancos ha desempeñado una importante misión de ayuda humanitaria en las fronteras polaco-ucraniana y rumana-ucraniana para colaborar con la gestión del flujo de refugiados. Por otro lado, durante este año 2023, un equipo de rescate fue enviado a Turquía para asistir en las tareas de rescate a raíz del terremoto del mes de febrero, además de los envíos de insumos a ese país y a la República Árabe Siria.

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juan gentiletti

Juan Gentiletti

Hola, soy Juan, tengo 24 años, soy argentino y actualmente estudiante avanzado de la carrera de Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Rosario (UNR).

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